Un lugar increíble con una ubicación tranquila. Los desayunos son deliciosos y la comida es muy buena. Las habitaciones están súper limpias, son de un tamaño decente y cuentan con un jardín, armarios y una cama grande y muy cómoda. 😊

El hotel es maravilloso, las habitaciones son enormes y las camas son super cómodas. Un desayuno delicioso con artículos caseros, croissants y también mermelada y un personal servicial. Una ubicación aislada, a 10-15 minutos andando de los Pont-Vieux. Un lugar perfecto, al lado de la parada de autobús.

El desayuno es delicioso, la comida es buena y las habitaciones tienen camas cómodas.

Una ubicación maravillosa a poca distancia andando del Portail des Jacobins. Camas súper cómodas, habitaciones sorprendentemente nuevas y baño bueno.

La ubicación del hotel es excepcional para visitar el Portail des Jacobins. Nuestra habitación era súper limpia, espaciosa, con una cafetera y una vista asombrosa. Además, disfrutamos de un baño privado. La decoración era muy cómoda.

La ubicación cercana al Porte Narbonnaise, el balcón en la habitación y la presencia de café y un hervidor de agua fueron aspectos que disfruté de este lugar.

La anfitriona, Juliette, fue simplemente perfecta. La habitación era estupenda, moderna y limpia. Me sentí como en casa en este oasis de tranquilidad. El desayuno estaba delicioso, especialmente el pan y las madeleines caseras hechas por Juliette. La ubicación era excelente, a pocos minutos del castillo y de la calle Trivale, llena de fantásticos restaurantes. Además, destacaría las vistas a la muralla desde la habitación. Muy recomendable.

Absolutamente nada ☺️

He pasado unos días maravillosos alojándome en este hotel boutique muy bonito. La habitación era súper limpia y de un tamaño decente, con WiFi gratis. - El personal es agradable y daba rápidas respuestas a mis necesidades. - Estaba en una ubicación aislada cerca de las tiendas, restaurantes. - Me sorprendió la cercana Pâtisserie Kristin's, tenían ricos postres y bebidas.

Nuestra estancia en este bonito hotel fue muy placentera. La ubicación es excelente, ya que está en una zona residencial y tranquila, pero al mismo tiempo muy cerca de las tiendas y restaurantes del centro de la ciudad. La habitación en la que nos alojamos era encantadora y confortable. Además, los propietarios se esforzaron en ofrecernos un delicioso desayuno casero con productos frescos y naturales de la zona.

La falta de canales de televisión en español podría ser una pequeña desventaja para algunos huéspedes.

La ubicación era maravillosa, ideal para lo que tenía planeado. Mi habitación era práctica, con un buen diseño, una cama cómoda, un balcón y un baño privado. Estuve super bien ahí.

Buena ubicación cerca del castillo y la calle Trivale. Desayuno abundante y casero, aunque faltaba algo de fruta. Baño bonito y anfitriona amable que hablaba español. Ambiente mágico y vintage. Recomendable y volveremos.

La habitación en la que nos alojamos era moderna y estaba impecablemente limpia. Disfrutamos de unas preciosas vistas a la muralla desde nuestra habitación. El desayuno era delicioso, especialmente los croissants y las mermeladas caseras. Nos sentimos como en casa gracias a la amabilidad de los anfitriones. La ubicación del hotel también era perfecta, cerca del castillo y con parking privado.

Aunque nuestra estancia fue estupenda, notamos algunos inconvenientes. Fue un poco difícil encontrar la entrada del hotel y tuvimos que esperar un poco en la calle antes de que alguien nos abriera.

Mi estancia en La Villa fue maravillosa. Desde la cálida bienvenida de los propietarios hasta la encantadora decoración de la habitación, todo fue perfecto. El desayuno casero era delicioso y las vistas a la Cité Médiéval desde mi habitación eran impresionantes. Me sentí como en casa y la ubicación era ideal, tanto cerca de la Cité como del centro de la ciudad. La tranquilidad y el aparcamiento dentro de la propiedad también fueron puntos destacados para mí.

Nada, ninguna queja. 😊

Mi estancia en este hotel fue realmente maravillosa. Desde el momento en que llegué, me sentí como en casa. La habitación era moderna y limpia, con unas vistas increíbles a la muralla. El desayuno era delicioso, especialmente las deliciosas tartas y mermeladas caseras. Además, el hotel se encuentra en una ubicación perfecta, cerca de muchos restaurantes excelentes y a poca distancia a pie tanto del castillo como de la ciudad moderna.

Casi perfecto:

Primero nos fuimos de crucero por el Canal du Midi y fue una pasada ver pasar por los esclusas. Luego exploramos la ciudad medieval y nos sentimos como auténticos caballeros. La historia de Carcassonne es alucinante, con 2000 años de conquistas y el influjo del catarismo. Los monumentos son una pasada, ¡ya no hay secretos para nosotros!

La única cosa que pediría es una opción para divertirse más para los jóvenes fiesteros como nosotros. Había muchas actividades familiares, pero nos quedamos con ganas de algo más emocionante y animado.